La asociación Euskal Herria Eskuahaldunak, dedicada a promover la escultura en el territorio vasco, lanza este verano en Otsagabia un ambicioso programa artístico que conecta memoria, identidad y creación contemporánea.
Dos esculturas homenaje en el paseo fluvial
Del 7 al 13 de julio, un equipo formado por ocho artistas está llevando a cabo en el entorno del Puente del Cerrajero dos esculturas con fuerte carga simbólica:
La escultura Enara / Alpargatera, diseñada por el artista de Barásoain Mikel Costa, rinde homenaje a las mujeres pirenaicas que cruzaban la muga para trabajar en Maule fabricando alpargatas.
La figura infantil, obra del escultor bilbaíno Eskerri, destaca el valor de la infancia como símbolo de futuro para los pueblos del Pirineo.
Ambas obras se realizarán in situ en el paseo del río, convirtiendo el proceso creativo en parte del espacio público.
Las calles de Otsagabia se transforman en una galería al aire libre
A partir del 15 de julio, y hasta el 15 de septiembre, las calles de Otsagabia se llenarán de esculturas en una exposición abierta que busca integrar el arte en la vida cotidiana, creando un diálogo entre las obras, los vecinos y visitantes.
Entre los artistas participantes destacan:
Blanca Sagasti Ube
Michel Ruiz
Leire Sainz de Aja
Porrilló
Iñigo Arístegui
Jon Iñaki Ormazabal
Guillermo Olmo
Mikel Costa
Ramón Balerdi
Eskerri
Exposición en Koleto Etxea: diversidad escultórica vasca
A finales de julio, se inaugurará en Koleto Etxea una muestra colectiva con la participación de 16 artistas, que ofrecerán una visión plural del panorama escultórico actual en Euskal Herria. Diferentes estilos, materiales y enfoques convivirán en este espacio expositivo, reafirmando la diversidad como una de las señas de identidad del arte vasco contemporáneo.
Este programa artístico es una invitación a redescubrir el espacio público desde una mirada sensible y creativa, donde tradición, historia y contemporaneidad se entrelazan a través de la escultura.